Mi nombre es Valérie SILBERMANN, tengo 49 años.
Si tuviera que definirme, sería como artista visual o recup'artiste.
Vitralista de formación (sitio vitral), integré poco a poco en mis creaciones otros materiales (chatarra de metal, cuero, papeles...).
Actualmente ensamblo todo tipo de elementos recuperados o recolectados recuperado en la naturaleza de acuerdo a mis vagabundeos (chatarra de metal, fibras, semillas, ...) mediante varias técnicas, algunas de cestería en espiral tan antigua, otra más comunes (ganchillo, costura, soldadura...). Pongo en sinergia diferentes materiales para tomar cualquier persona que le desee al corazón de la historia que cada una de mis creaciones cuenta.
Estos materiales cuyo pongo las vibraciones en resonancia a través de mis esculturas se convierten en los instrumentos de mis sinfonías.
Cada una de mis creaciones es única.
Según mis sentimientos, tengo la posibilidad de crear una obra que armoniza las materias utilizadas y la persona que pide una creación.
Para completar mi retrato aquí es un extracto de un artículo escrito por Cecile GUYOT :
« Fue a dura escuela y ella aprendió la técnica del maestro vidriero. Y luego, poco a poco, su experiencia ayudando, ella se permite seguir el camino de su propia inspiración. Lejos de una manera de hacer toda trazada, se permite expresar el talento que parece estar en ella para siempre.
Hoy en día, Valérie siente que "cada trabajo es un estado de ser, un historia" y refleja una evolución. Representa una "trama de vida" entre el pasado y la generación futura. La obra a veces parece sobrepasar el artista, forzandola por una alguna extraña alquimia, a modificar su idea inicial y descubrir que era el vehículo para algo que va más allá de ella. Un sentimiento que le gustaría hacer compartir porque, dijo, "todos tenemos un don artístico". »